Un psiquiatra en la SRE para el síndrome Ulises de migrantes
Oaxaca, Oax., 7 de agosto de 2009 (Quadratín).- El jueves 31 de julio, desde la Dirección de Radio de la coordinación General de Comunicación Social de gobierno del estado fue remitido a los medios locales un boletín con el siguiente encabezado: El PRI y el PAN son la misma mafia: López Obrador.
En el primer párrafo del citado boletín se destacó que al ser entrevistado en el aeropuerto de la ciudad de Oaxaca, el autollamando presidente legítimo, Andrés Manuel López Obrador, al ser cuestionado por los reporteros sobre la posibilidad de una alianza en Oaxaca con el Partido de Acción Nacional de cara a las elecciones del 2010 respondió: No, el PRI y el PAN son la misma mafia, nosotros no podemos aliarnos con partidos de la oligarquía, con los responsables de la tragedia nacional
Alguien llegó a pensar que en una lamentable equivocación de la parte gubernamental, pero no fue así. El boletín se redactó en la Coordinación de Comunicación Social del gobierno del estado y se remitió desde el correo electrónico del Director de radio, José Velasco Vásquez, a los medios locales y hasta a algunos nacionales, con la abierta intención de darle la mayor cobertura al posicionamiento del AMLO, líder moral de PT y el PC y de esta manera alimentar la campaña que tanto el PRI como el propio gobierno del estado han iniciado para frustración la intención del PAN, PRD, PT y PC para ir en coalición para las elecciones locales del 2010.
La estrategia se modificó radicalmente días después, cuando desde la misma oficina gubernamental se empezó a recomendar y sugerir a los representantes de los medios locales que le hicieran el vacío informativo a la segunda etapa de la gira de AMLO por los municipios de usos y costumbres de la entidad.
Coincidió lo anterior con la reunión para el martes 11 sostuviera el presidente del CDE del PRI, Jorge Franco, con los diputados propietarios del congreso local y la estructura electoral de ese partido. Allí se expresaría la preocupación de la dirigencia estatal priista por la recepción popular brindada a López Obrador en la primera etapa de sus giras por algunos municipios de usos y costumbres de la región mixe.
En la misma reunión los diputados locales y todos los responsables de la estructura electoral del PRI (en donde figuran un buen número de funcionarios desgobierno del estado) fue que era necesario impedir una respuesta masiva en las futuras giras de AMLO mediante la organización de actos paralelos con las autoridades municipales en el municipio, fecha y hora convocada por las huestes obradoristas.
Si con las recientes reformas a la Constitución y al CIPPEO, el PRI envió una clara señal de que no está dispuesto a perder su condición de fracción mayoritaria en el Congreso local, ahora lo que evidencia es incertidumbre si no es que temor ante la inesperada determinación de un líder nacional opositor de recorrer los municipios de usos y costumbres de la entidad para hacer proselitismo para la causa de su movimiento y, por supuesto, aprovechar la coyuntura electoral de Oaxaca para intentar inclinar el fiel de la balanza hacia el senador Gabino Cué como candidato a la gubernatura por parte del bloque opositor en construcción.
En el gobierno del estado y en los altos mandos del priismo estatal preocupa que los ciudadanos de los municipios de usos y costumbres que tradicionalmente le han aportado un buen caudal de votos en las elecciones federales y de gobernador, para el 2010 pudieran modificar sus preferencias electorales y constituirse en un probable factor de derrota si prospera la coalición electoral. No por nada ya en el cuartel general del PRI se han prendido los focos rojos mientras un vocero de prensa ya parafrasea el slogan panista de la campaña presidencial del 2006: López Obrador es un peligro para Oaxaca.
* Investigador y académico de la UABJO, miembro distinguido de la sociedad civil